terça-feira, 15 de dezembro de 2009

Elecciones

En este último día 13/12, hubo elecciones presidenciales en Chile.
Después del periodo de dictadura de Pinochet (1973-1990), La Concertación (de Partidos por la Democracia) es la fuerza política de centro-izquierda que ha tenido el poder. Aunque no sea mi deseo, a mí me parece que va a cambiar. En la primera vuelta de esas elecciones, el único candidato de derecha, Sebatián Piñera, he logrado una buena votación, cerca de 44% de los votos validos contra 29 % de los votos de Eduardo Frei, candidato de la Concertación y que ya fue presidente (1994-2000).
En esas elecciones, de lo que he visto, la izquierda ya no sostiene una buena unidad. Fueron 3 candidatos, con 29, 20 y 6% de los votos. O sea, rota. Algunos con más esperanza, todavía creen que se puede remontar esta diferencia en la segunda vuelta (sí, aquí hay primera y segunda vueltas si el candidato más votado no obtiene la mayoría de los votos válidos, como en Brasil).
Aquí, ninguna persona es obligada a votar, solo aquellas que se inscriben. Una vez inscripto, si no votas tiene que pagar una multa. Así que la presencia en las urnas es alta. Las elecciones ocurren de forma tradicional, con votos en papel en una urna. Pero los resultados son divulgados así de rápido y al final de la noche (las urnas cierran a las 16h00) ya se han computados casi todos los votos.

Una novedad pa’ mí es que aquí hay financiamiento público de campaña. Gracioso es que el Estado no antela el pago de los costos. Funciona así: el candidato gasta y, al final de la elección, el Estado repone la plata a una tasa de $628 (algo como R$ 2,20) por voto recibido por el candidato. Valores a parte me pareció inteligente el sistema una vez que hay más criterio con los gastos, que tienen que ser eficientes (obtener votos) para que se puedan cancelar. Pero aún no sé como quedan los suministradores… ¿será un contracto bajo riesgo?

Nenhum comentário:

Postar um comentário